La plaza del pueblo.

Al final somos tan distintos que somos iguales. Tanta particularidad, tantas mechas en el pelo, y todos compramos arroz para cocinar y nos gusta el papel de doble capa.

Apostados en el asiento más alto de la plaza del pueblo, analizamos nuestras fiestas con un desdén visible. Siempre los mismos grupos, que mierda de comercialidad, si esos solo tienen un tema, estos están para el arrastre, seguro que han pagado por tocar, pero por Dios santo dime que ese cantante no tenía la cabeza en el formol de Futurama….

Nosotros, los inquietos, los valientes, los culturetas acérrimos, los amantes del riesgo extremo, los glory holes del indie-pop-baile. Nunca hay nada para nosotros, salvo dos fiestas hogareñas y una actuación debajo de una farola. Que no se enteran estos jerifaltes, burgueses, acomodados, buscavotos.

Y nos miramos al espejo y somos igualitos. Clavados. Cana a cana. No hay más que mirar el cartel del Primavera Club 2010 para darnos cuenta que la equidistancia es un alegre ritmo moderno.

Si en las urbes populares pecamos de rehabilitadores de almas ejecutantes, en ese festival la cosa es tan impactante que acaba siendo similar:

  • 40 grupos, de los cuales conoces 2.
  • Bandas tan nuevas que su single solo se encuentra en los top manta de Bangladesh y que aún no tienen local de ensayo.
  • Formaciones tan frescas que aún usan pañal.
  • Algún carcamal que recupera uno de sus discos viejos porque no ha podido hacer otro igual de bueno. (aka, “un pasado que no debemos olvidar”….¿Quienes no deben hacerlo?¿Quienes no vamos a olvidarlo o quienes no los conocen?)

Grupos con gran desparpajo, sin duda. Como yo jugando un partido de 1ra División: Una primera parte de ensueño, la segunda de olvido. En el fondo, es una forma como otra cualquiera de explotación. Una suerte de consentida pederastia. Porque el año que viene ninguna de ellas (o una, despistada) volverá a tocar en dicho certamen.

«Su primer disco sí que molaba», «Antes eran más guays», «Después de sus singles son un poco truño ya», …. La vida es más sencilla si no tienes referencias. Hay que ser el primero en traerlos, en primero en defenderlos, el primero en encumbrarlos.  La generación Apple de ansiedad consumista, en formato siete pulgadas. Bien es cierto que muchas de ellas luego se encargan de echar por tierra las ilusiones iniciales. Algo normal, por otra parte.

Espero, intuyo, que los organizadores se llevarán pasta de esas contrataciones. No sé de qué manera, pero apostar por grupos de singles en vinilo y giras que en el resto de Europa quedan arropadas en squads o similares tendrá algo que ver con el marketing que se estila en nuestro país (aka, «gol del promotor sobre fondo ingenuo e ingenuo de espectador»), ahora enganchado al Pitchfork como antes lo estuvo al NME. Distinto collar, idéntico perro.

Eso hace que las formaciones con cierto recorrido, caso de Stereolab o Polar (y Zahara o La Bien Querida en breve) por ejemplo, jamás encuentren acomodo en ninguno de nuestros escenarios. Ni festivos, ni arties. No en un festi -son viejos, pero no tanto como para tocar uno de sus discos enteros, auténtica condena en vida para un creador sin deudas-, no en una sala de tamaño medio (no suele salir a cuenta para la parte contratante), no en un garito situado a 5000 kilómetros de su hogar. En el fondo, ¿eso no es lo que le pasa a Bustamante?

PD: Y dije Primavera Club, porque se acaba de presentar, pero podría decir cualquier otro certamen de ese pelo.

7 comentarios en «La plaza del pueblo.»

  1. Jajaja, vaya arrebato a lo típico tío que se acerca a la Rockdelux por primera vez y huye espantado (yo lo viví).

    Casi toda la razón. En parte está guay que se acerquen propuestas novedosas o arriesgadas (justo nos contaba hoy un jerifalte del Zinemaldi que muchas de las películas que se deciden en marzo que van a venir todavía no están ni rodadas), pero también es cierto que la excusa de lo novedoso tapa goles de promotores y propuestas paupérrimas. Empieza a pasar también en la escena nacional (¿ P o l o c k?).

  2. Si, vale, podría ser lo del RDL que dices…jajajajajajaja

    ¡Pero es que es leer el cartel de estos festis y como si leyeras los ingredientes de una pomada!

    Y puedes poner los nombre enteros y seguidos tranquilamente, hombre….

  3. Jaja, pasando, que uno hace extraños compañeros de cama en estos mundos del indie, y la combinación ego + Google search es matadora (yo lo viví bis).
    Ya te haré un mix de las cosillas nuevas 😉

  4. los nombre de los grupos molan: Screamin Females, Ganglians, Smoke Fairies (o querrán decir Farias?), Eat Skull, M Ax Noi Mach, Tamaryn (mi preferido), Zola Jesus, Fasenuova (vuelve el new age)… Enfin… el RDL cada vez es más mierda, y mira que he descubierto grupos gracias a la revista, pero eso ya no ocurre (casi) nunca…

  5. hay que hacer un grupo de covers ya!
    smoking farias!
    jajajajajaja

    de aquí a recuperar el logo de Bufalo para una cami, un pasito

  6. Pitchfork es el nuevo Rock De Lux. Un 2 en Pitchfork (Crocodriles, Warlocks, Music Tapes, Tall Dwarfs…) significa que el disco puede ser muy bueno. Un 10(los discos de Animal Collective en Domino, por ejemplo) significa que mejor mirar para otro lado. Stereolab dificilmente tocarán en el PC ya que hay divorcio de por medio: Yo me quedo con los niños, tú con las guitarras y…¿Quién se queda con el grupo?
    !00% a favor de ver en directo a grupos que solo tienen 7″. La inmediated del pop, ¿no?. Love, disfruta de estos tiempos de música gloriosa (Pains, Oh Sees, Intelligence, Nice Face, Woods, Summer Cats, Moon Duo, Japanther, Ninjasonik, Shrag…) que estamos viviendo a 45 RPM.
    El sofa te espera para el PC 2010.

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