Muchas gracias

Hablo en mi nombre, pero seguro que Yon Vidaur comparte muchas de mis frases.

Estoy feliz, mucho. Por el concierto de ayer en Donostikluba. A la tarde era un manojo de nervios. No es fácil cambiar de tocar y cantar tú solo a hacerlo con otra persona, con bases pregrabadas que seguir.  Pero al final los nervios se volatilizaron al subir al escenario con la guitarra en la mano.

Bien es cierto que estaba más tenso de lo normal, como bien apuntásteis algunos después. Pero eso no frenó mi verborrea habitual ni nada. Esto es otra cosa. En este formato, con todos esos añadidos en lata y la guitarra de Yon, mejor centrarse en presentar bien las canciones. Ya dejaremos el desparrame para dentro de 40 conciertos, o cuando me toque tocar solito.

Creo que nos salió muy bien. No detallaré el contenido del concierto, porque será el que paseemos normalmente en esta gira. Pero sí que me gustaron mucho algunas partes del mismo. Habrá que nivelar algunas cosas, poner más presencia de unos sonidos y menos de otros, pero el movimiento se desmuestra andando. ¡Que era nuestro primer concierto! Gracias a los técnicos, que nos salvaron en la prueba de un par de momenticos tensos.

Pero lo que más ilusión me hizo sucedió al final. Al acabar la última canción me dispuse a abandonar el escenario. Allí estaba Sergio Cruzado, el loco organizador de este y otros festivales elegantes. Tenía cara de emocionado, muy emocionado. Me dio un abrazo, que devolví multiplicado por 49, y me dijo «ha sido muy emocionante, muy bonito, maravilloso». Pensé que se refería al último tema ejecutado, dedicado a Pedro San Martín y que, de alguna manera, nos permite a Yon y mí rendir cuentas con nuestro pasado. Pero no, se refería a toda la actuación.

Él ha sido el principal culpable de esta nueva aventura musical actuante. Nos supo transmitir lo bonito que sería tocar «Apropósito» sobre un escenario, nos trasladó esa ilusión que como autores a veces nos parece dificil de ver.  Nadie le gana a tenacidad, a ganas de montar cosas, a cuidarlo todo con mucho mimo y esmero, a hacer que cada día sea especial. Una persona que ha hecho, hace y hará todo lo posible para traer a Donostia, con su pasta o la de otras grandes empresas, actuaciones siempre interesantes, grupos atractivos que normalmente no cuentan con un gran calado entre el gran público. Muchas gracias, Sergio, Ibon, Bea, (Martxelo!) por hacer que el de ayer fuera uno de los días más bonitos de mi corta vida.

Charlamos y mucho con la gente, que respondió positivamente a nuestro show. Y mira que son colegas cabrones algunos, ¿eh? :D. Escuchamos atentos a Antonio Luque (¡qué alto és!) y a los divertidos noruegos de mylittlepony, mucho más personales en vivo que en disco. Y tras la requetedivertida sesión de Pin y Pon Djs, la noche musical acabó con un momento irrepetible (que solo pasa en Donostikluba) que espero la persona que grabó el vídeo tenga a bien hacérmelo llegar: Antonio Luque haciendo el Bigmouth Strikes Again en el exterior de la sala Gazteszena.

Nadie sabe de dónde salió la guitarra, ni porqué tiró por ahí. Igual empecé yo y el se apuntó. No lo recuerdo. Intenté seguirle. pero la tocaba en otro tono y en otro momento vital más sobrio que el mío. Pero guardo en mi corazoncito ese momento. Espero, sinceramente, que no sea uno de esos momentos de «Que bien he cantado estando piripi, ha sido la hostia, espera que vea el vídeQUE HORROR QUE VERGUENZA QUE MAL!» 😀

Gracias a todos. Nos vemos en Manlleu el sábado que viene.

Acerca del autor

Giorgio Bassmatti