Por qué no hay que tocar en bares

«No niego que deba haber sonidos de conversación. Yo mismo acudo a establecimientos los fines de semana a tomarme unos tragos con mis amigos y conocidos. Las tabernas son espacios de jolgorio y contacto social, de risas y confidencias, de miradas furtivas y sonrisas cómplices. Precisamente por eso, no se puede exigir respeto de manera indignada, pero…¿Entonces, que coño pinto yo en todo eso?»

Bassmatti nos cuenta en su blog las razones por las que prefiere tocar en cualquier sitio que no sea un bar