La Casa Azul volverá a inundar la ciudad con sus canciones vitalistas y un montaje renovado
Guille Milkyway (La Casa Azul) hace pop sideral, tan alegre como bailable. Su nuevo disco, “La Polinesia Meridional”, es otra ración de elegancia, nervio y estilo. Sus conciertos al aire libre reciben grandes críticas, así que imaginenlo bajo techo. Ahora rompe ligeramente su molde de actuaciones unipersonales, tocando con más músicos.
¡Más humanos en el escenario!
Los discos tienen un punto de fantasía y teatralidad que siempre quise mantener en directo. Ahora, siendo tres en el escenario, todo mejora en cuanto a contundencia. Y me hace estar más liberado.
¿Novedades en lo visual?
Muchas. Cuando estuvimos creando los contenidos para esta gira vimos que lo visual debía acompañar las canciones, potenciar su elemento emocional. Nunca ser protagonista.
¿Cómo será el concierto?
Vamos a tener tiempo para poner en escena el contenido de la gira, darle el ritmo deseado: Un inicio teatral, un desarrollo con cierto sentido… Con espacio para caomposiciones antiguas. Nunca fui de los que reniegan de su pasado.
¿Podremos comprar todos tus vinilos en esta cita?
Sí. Toda la vida he querido editar en vinilo, y hoy en día es el formato principal para coleccionistas como yo. Está claro que después de 60 años se ha establecido como referente del soporte sonoro.
El comienzo del nuevo CD es arrollador, imparable.
Ese “barroquismo” es una fijación personal. Pero busco que tenga un sentido. Siempre he querido ver si es compatible crear este muro sónico con la inteligibilidad de los detalles. Poco a poco lo voy consiguiendo.
Sigue habiendo mil referencias: nombres, sonidos sampleados…
Parece que pretende ser un alarde, pero no es eso. La música forma parte de mi día a día, y brota en las canciones de esa manera.
Has tenido tiempo para poder hacer otras cosas: Música para dibujos animados, teatro, películas o anuncios
No debería coger muchos encargos, pero hay cierta necesidad de sobrevivir. Y me reconforta ver que soy uno más de esos compositores que intentaban marcar un sello o dejar huella en todo lo que hacían, ya fuera personal o publicitario.