Vuelve el clásico farrero post navideño a nuestra lista de actividades musiqueras. A mediados del mes de enero, superadas las rebajas de precios y aumentos de peso por ingesta de turrones, la gente de Ttan Ttakun Irratia organiza su habitual plan(azo) con mil y un ingredientes dispuestos para invitarnos a mover el cuerpo. Actuaciones musicales y sesiones de pinchadiscos. Y una larga sobremesa que se extenderá hasta las seis de la mañana.
Con intérpretes de muchos sabores. «El único criterio que utilizamos es el de elegir grupos que ofrezcan un directo atractivo. Pero la verdad es que siempre hay un escenario rockero y otro bailongo tipo funk-reggae», nos asegura su coordinador general Asier Mendizabal. Siguiendo las directrices abiertas de una radio en la que cualquiera puede presentar la propuesta para hacer un programa («siempre que sea en euskera. Es la única condición que ponemos»).
Su emisión se puede seguir vía web (www.ttanttakun.com) y unos hercios que este año llegará más lejos: «por fin, tras muchos años de solicitudes, nos llego el turno y ya estamos emitiendo con un repetidor desde Ulia. De este modo nuestra señal llega a todas las zonas de San Sebastián, y entramos en los pueblos cercanos como Hernani, Rentería, Lasarte, Zarauz…».
Este año no es el del cambio de tendencias actuantes. Los jóvenes catalanes Pennycocks acercarán a Gazteszena su estilo punk setentero, directo e impactante. De los tolosarras Lobo Eléctrico poco nuevo se puede decir. Sus ‘Noches de esperma negro’ (así denominan a sus actuaciones) son una mezcla de rock sudoroso y ‘glam’ pendenciero. Ion Celestino y los Activos caldearán el escenario pequeño (en este festival, hay dos tablados diferentes en Gazteszena) con su rocksteady-jazz y otros similares sabores jamaicanos.
Por carreteras cercanas discurrirá la propuesta de los navarros Funkideak. Doce mozos que homenajean a insignes pesos pesados de la talla de James Brown, Maceo Parker o Tower of Power. La fiesta se cerrará con reconocidos agitapiernas: DJ Budin y sus animosos sonidos negros, Reverendo John Howell y los calambres de soul-rocksteady. Y los tonos más clásicos, rockeros y punkarras que salen de los platos del DJ Manu Pogo.
Guardamos para el final dos de las ofertas más atractivas. Por un lado, los míticos Speed. Denominados por muchos como «el primer grupo punk de Donostia», obtuvieron éxito nacional en los años ochenta con su serie de discos irreverentes.
Para muestra, un botón: algunos de ellos cantaban la canción propia ‘Calderete’ en sus cenas. Y la lanzaron agrupados bajo el apropiado nombre de Gamberros Unidos. Fue el tema del verano de 1986. También formaron parte de No, cuyo apretado mini disco ‘Ciudad violenta’ (siete canciones en siete pulgadas) reeditó hace no muchos años el aventurero guipuzcoano Luis Beltza, de Beltza Records.
Aires años 50
Y con disco, nuevo, bajo el brazo, llegan los The Screamin’ Targets. Gentes de Nuevo Catecismo Católico (este año cumplen 20 años en la carretera) y Supertrooper, que publicaron a finales del 2011 el muy atractivo debut de título homónimo.
Empezando por la portada, una chulada surfera dibujada por Bunker Graphics. «Es justo lo que queríamos: aires a póster años cincuenta, divertido y diferente de la típica foto de grupo», cuenta Gisela Crespo, la cantante del grupo. Una primera rodaja que se distribuye también por Japón, Noruega, Suecia, Francia o Alemania y que edita Ghost Hoghway Recordings, sello especializado en singles cañeros y que cuenta con un catálogo en el que destacan los homenajes a Oblivians, The Sewergrooves o Imperial State Electric.
Crespo y Arturo Ibáñez (NCC) son los precursores de esta banda donostiarra que practica el rock ‘n’ roll con corazón power pop. «Si escuchas grupos como Blue Angel te darás cuenta de que esa combinación es posible. Muchos de los clásicos que empezaron con el rockabilly, como Roy Orbison, también hacen temas con increíbles melodías pop . Esa es la idea: divertirnos con el rock´n´roll, hacer bailar a la gente intercalando pildorazos que vayan directos al corazón».
Los tonos vocales suenan dulces. «Me encantan las cantantes de los 60 como Carol King y los grupos de chicas como las Ronettes o las Shyrelles. Los sonidos extraños de Joe Meek, Del Shannon y las variantes más sesenteras de Rocky Erickson».
Con toques nuevaoleros. «Adoramos a los Plimsouls, The Beat o Jack Lee, y toda esa corriente que nació de los Nerves. También a Blondie o Cheap Trick». ¿Suficiente para hacerse una foto, no? Sin olvidar la contrastada calidad y saber hacer de sus integrantes, a quienes no pillarán desafinados nunca.
!Ah¡, y un aviso que es importante: se recomienda a toso el mundo ir pronto a la fiesta. El taquillaje vuela. Nos lo cuenta el promotor: «No hay venta anticipada. Cada persona podrá comprar un máximo de 2 entradas a partir de las 22.45 horas en la misma taquilla de Gazteszena. En cuanto se agoten las 700 entradas, el que quiera entrar deberá esperar a que haya gente que abandone el recinto».
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