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La Kinky beat: Rambla festiva

Bajo el marrullero y vivaracho nombre de La Kinky Beat se esconde una multiétnica banda afincada en Cataluña que, tras apiñar con ganas a los espectadores en torno a su escenario en el reciente Kilometroak (“Estuvo fenomenal. Siempre es un placer poder participar en este tipo de actos, culturales y reivindicativos a la vez”, responde la cantante Matahari/Miriam), visita los kafe antzokis vizcaínos este fin de semana.

El viernes toca visita al de Bilbo y el sábado paseo por el de Ondarroa. Se vienen a presentar el aún calentito “Made In Barna”, su debut discográfico. Un trabajo repleto de ágiles sones y combativas letras, muy en la onda del ínclito afrancesado Manu Chao, la infatigable Amparanoia y elementos de ese percal contestatario.

Sin olvidar (ellos no lo hacen) la aportación del cercano Fermín Muguruza. Turno para el batera respondón, Gerard, que con la damisela cantarina se reparte sin separación las contestaciones. ”Dada su larga trayectoria profesional Muguruza es un referente para toda la juventud. Creemos que es un gran artista y comunicador, y para LKB siempre ha sido un apoyo y una referencia en el camino”.

Los primeros y más relevantes a ojos del menos ducho hace saltar la liebre. Gentes de Radio Bemba, apelativo que Manu Chao se inventó allá por el año 2000 para denominar a una de sus mutantes bandas de compañía, forman parte del núcleo principal de esta populosa banda catalana.” Fue muy interesante trabajar con Chao, una gran oportunidad de aprender y crecer como músicos”, se sincera Gerard.

Pero si hablamos de futuras colaboraciones, eligen como respuesta una tonada ya conocida. ”Como cantaba Carotone: ‘El futuro es incierto…’”. Parece que el gerifalte de Mano Negra empleó su apellido fonéticamente y dio puerta a aquella formación de apoyo.

En las periferias de la ciudad condal, donde las melodías son arrabaleras y callejeras (como acertadamente recoge el diseño de este disco de La Kinky Beat), dejó el llamado “desaparecido” a varios de los integrantes de aquellos Bemba: el ya presentado batería Gerard y el guitarrista Nadjid, miembros ahora perennes de Kinky Beat.

A su alrededor comenzaron, a base de imparables “jams”, los KB a sacar chispas en aquél local asentado en la industrial Badalona. Allá estaban, y están, la ondulada vocalista Matahary y su réplica masculina Willy Fuego, Donato y Manel (ambos de la mítica banda barcelonesa Trimelón)… Arremolinados todos alrededor de este nombre que “tomamos de una canción que nos representa bastante bien y  combina los elementos de barrio que todos llevamos, con la visión europea de proyecta la ciudad”.

De esa capital catalana que les vio nacer como banda, este nuevo trabajo recoge “la mezcla de estilos y las características propias de los diferentes barrios que rodean la ciudad. No sólo el aspecto mas moderno y multicultural que se ha puesto de moda”.

Este estreno “barcelonés” es también pistoletazo de salida de una casa de discos, Kasba records (www.kasbamusic.com), especializada por sapiencia y querencia en ritmos ska, reggae, rock y el resto de etiquetas combativas y enérgicas. “Todos somos peña de Barna que nos conocemos hace tiempo y hemos coincidido en varios proyectos”. No hay más que ver la lista de integrantes de la editora casa catalana: Gente de Color Humano, Dusminguet, o los ya manidos Radio Bemba se encuentran entre la solidaria peña rectora de esta casa.

Made in Barna” empieza peleón, con una lisérgica diatriba que luego aparecerá en momentos puntuales. Porque aquí lo que predomina es la reivindicación, bien acompañada, eso sí, de cañita melódica.” La sociedad hoy en día tiene su aspecto positivo, hay medios para tirar pa’lante. Pero nosotros cantamos contra la rutina diaria, el estancamiento colectivo y la represión del mundo globalizado. Nos gusta contar y cantar las cosas de la vida cotidiana, sin caer en lo más panfletero y político. Hacemos música y intentamos transmitir con ella un mensaje positivo”.

En el fondo, sus músicas no suelen parar en demasía: un poco de ska, un poco de reggae, un poco de patadita y saltito Chao, una pachanga gitana. Hábitos todos fusionados en pro de la festividad melódica.”Creemos que la banda tiene su propio estilo, más acelerado y rocanrolero, ideal para el directo”.

Hasta la elaboración del disco parece haber sido una fiesta.” Sí, intentamos grabar el repertorio pero reproduciendo los esquemas de nuestros conciertos. Pienso que nuestras actuaciones son nuestro punto fuerte, porque hemos rulado mucho sin tener nada grabado. Además, los técnicos son antiguos amigos y facilitaron bastante el trabajo en estudio”.

A su favor, además de esa demostrada energía sobre los escenarios, diremos que entre tanto estilo similar La Kinky beat siempre encuentra hueco para detalles de aquí y allá, en principio divergentes, que saben insuflar energías a su esquema. La velvetiana canción “I Come From”, por ejemplo, funciona como bocanada de aire fresco tras inmersión de apnea.

Y no cierran puertas ni en la cuestión idiomática (“no vamos a cerrarnos en un idioma cuando el mundo está girando en sentido contrario. Creemos que poder cantar en varios idiomas enriquece el conjunto”) ni a la hora de utilizar nuevos tiempos digitales: “siempre hemos querido trabajar los estilos de toda la vida con la música actual: jungle, drum & bass, electrónica en general…

De a ristra de creadores clásicos, eligen quienes tu y yo ya sabíamos: ”Los Clash, Toots & The Maytals, Bob Marley. Y por supuesto, Camarón de la Isla (descanse en paz). También nos interesan cosas de hoy, como el hip-hop de Frank T, algo de jungle alternativo (tipo La Phaze), los Asian Dub Fundation…”

Tras las fechas vascas, toca paseito por el continente europeo. Italia, Francia, Bélgica y Holanda conocerán de primera mano los usos saltarines de esta multinacional banda.”intentamos llevar nuestra música a todos los lugares donde quieran oírla“.

Publicado enEntrevistas

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