Saltar al contenido

La Habitación Roja: Mimando el rock

Regresan a nuestra ciudad las guitarreras emociones de La Habitación Roja. Los valencianos han editado su cuarto disco este año, de explícito título “4”, y se están dando una segunda vuelta por el Estado (gira de Septiembre 2003 a Enero 2004) tras el éxito de su actuación en el Festival Internacional de Benicassim de este verano.

Por fin hemos acabado un concierto en el FIB con buen sabor de boca. Las actuaciones en directo son lo que más nos gusta, y poco a poco hemos ido aprendiendo a transmitir más energía”. Pau Roca, el guitarrista del grupo, se acerca a nuestro periódico vía email para presentarnos las virtudes de este trabajo, ahora sin teclista fijo. Ya solo quieren las teclas como aditivo puntual y no como instrumento fijo.

Esa ausencia les da un toque más directo y rockero, como admite Pau desde la distancia, buscando la frescura que caracterizó su primer trabajo “La Habitación Roja”. Los dos siguientes, “Largometraje” y “Radio”, buscaron más matices y una mayor complejidad sonora.

En su último CD se deshacen de superficialidades y entregan un disco grabado casi en directo, del que ya han salido varios singles. No dudan al afirmar que nunca han estado en tan buena forma como ahora. “Seguro, pasamos una crisis, la del tercer disco y ahora estamos en nuestro mejor momento, tanto musical como personal”. Podremos comprobarlo este viernes 24 en la Sala Kandela del barrio donostiarra del Antiguo.

Ese buen momento se puede disfrutar en canciones como “Edad de Oro”, la que mayor repercusión ha tenido. Demuestra ser una canción directa con sus cuatro simples acordes. Y algo reivindicativa y melancólica. “Las dos cosas, aunque supongo que un poco más protesta que melancólica, no estoy muy seguro”.

Todo porque en la letra se habla de Tierno Galván, la moda electrónica de la España de los 80 más experimentales y otros derroteros culturales de los últimos cuarenta años. Curiosa la referencia textual al tema “La Chica de Ayer”, remarcando la versión que Enrique Iglesias realizó de ese éxito de Nacha Pop.

Tan bien les ha funcionado que la recuperan en formato remezcla (realizada por los electropoperos catalanes Velcro) para la curiosa campaña del colectivo “pre-texto”, en el que canciones de los grupos adscritos al proyecto viajan en lote indivisible con una camiseta creada exclusivamente para dicho producto cultural por artistas modernetes de postín.

El disco “4” sigue navegando por los derroteros pop-rock habituales en el grupo. “Los últimos veranos” no hubiera desentonado en el primer disco de Gene. O esos coros tan Teenage Fanclub en varios temas. No solo miran a los dos nombrados, sigo que siguen destacando como referencias a “los Kinks, Led Zeppelín, Jam, Bob Dylan, Leonard Cohen, los Rolling Stones…

Y si me apuran hasta a Jonathan Richman, con esa letra hablado-cantada de “Réquiem” cargada de cotidianeidad. Porque eso caracteriza las letras de este grupo levantino. Buscar narrar historias de desamores recientes, de dolores emocionales de veinteañeros narrados con cierta ingenuidad y positividad.

Y mucha queja diaria expresada con guitarras algo sucias pero melodías cristalinas. ”Es nuestra mayor fuente de inspiración, nuestro día a día, y supongo una de las mayores razones por las que la gente se identifica con las letras”. Esa identificación ha convertido esta cuarta referencia de LHR en la más vendida en la historia personal del grupo.

Mientras aprovechan esta gira para presentar su próximo single “Cuando te hablen de mí”, plagado de canciones inéditas y presto para editarse en Noviembre, ironizan sobre la cualidad populista de su música. “Creo que somos para todos los públicos. Sólo que somos inexistentes para mucha, mucha gente”.

Publicado enEntrevistas

Sé el primero en comentar

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *