¿Por qué es mejor sacar singles que CDs completos?

Bajo esta pregunta cuya respuesta final puede ser antagónica al planteamiento inicial, voy a soltar palabrejas al vuelo que hasta ahora revolotean solo en mi interior.

El CD ya no vende. Ni a nivel comercial, ni a nivel de escuchas. Nadie atiende a un CD completo, ni suele correr a la tienda (¡ni a descargarlo ya!) por incluir un single que nos gusta mucho.

El single, en su formato vinilo, va aumentando las ventas. Es más barato. Tiene un nicho bastante estanco de seguidores que, como zombies, se han levantado de sus tumbas y han seguido invirtiendo en pedacitos de vinilo rayado voluntaria e involuntariamente.

Eso hará, supongo, que se venda lo mismo. Poco. Que no es poco.

A nivel underground, donde flotan la mayoría de los que me gustan, un single vale como excusa para girar cada poco. Piensen que, Putamierds aparte, las giras de los grupos suelen ser muy cortas, muy breves y muy bebidas. Así que si cada 6 meses sacamos 3 o 4 canciones, tenemos “excusa” para girar y vender las cosas en los conciertos, el sitio donde más aligerarás equipaje. Tú y Nacho Vegas.

Para ese nivel de blogs/T/FB, el single da igual que el CD entero. Si les molas, sales. Y a los 3 minutos sale un mensaje de otro. Así es la vida, chaval.

Sacar singles te aleja, si alguna vez estuviste cerca, de tener un hueco en los mundos informativos en época de promoción.

¿Y si tengo un disco, lo troceo y lo reparto en porciones? Haz la prueba. No lo sé.

Para que Beyoncé salga en los tele/diarios tiene que haber aterrizado en Barajas con un tacón roto o sacarse una teta en un Rich. Tampoco ella se aleja del paradigma mental “sin disco no entrevisto”

A veces, como con Beyonce, no sabría qué disco comprarme. Es tal su volumen y constancia de singles que uno no sabe si vuelan solo pro atunes, vienen empaquetados, o son adelantos de futuros lanzamientos.

Add-on:

Hay mil gruidos nuevos. Y mañana mil más. Y la democratización del acceso a las grabaciones ha hecho que todo el mundo pueda editar lo que sea. No te agobies mucho si no consigues muchos conciertos. No hay sitio para todos, salvo que estes de actualidad o tengas una agencia maja y caradura.

Y cada vez hay menos salas. Y las que quedan son cada vez más personales en lo ejecutante.