“¡Pero si es blanco!”, habrá pensado más de uno al ver la foto. Pues si, más blanco que las sabanas de los anuncios de detergente. Pero lo mismo dijeron de Elvis en los suburbios de Memphis, y ya ven la que montó luego.
Hay costumbre de asociar al dub, esa vertiente moderna del clásico reggae, con inquietos chicos de color, por historia y tradición. Wobble desmonta el mito a base de creatividad y frescura. Parte del éxito actual de estas músicas debe atribuirse sin duda a la labor de este hombre, nacido bajo el nombre de John Wardle y que decidió cambiárselo por el actual porque “sonaba muy bien, a bajista de reggae jamaicano”.
Así que vayan haciéndole un hueco en sus agendas (y reproductores de Cds). Su próxima cita en directo es el 2 de septiembre en el Teatro Principal donostiarra, dentro del Festival de Nuevas Músicas. Promete ración ancha de dub.
Jah Wobble lleva tiempo demostrando que su inquietud musical une las más variadas tonalidades musicales mundiales sin cortarse un pelo, refrescando estereotipos y ofreciendo mucha calidad en sus atrevidas composiciones.
Todo se entiende mejor cuando se observa la gente que tocó a su puerta pidiéndole que colaborara con ellos. ¿Recuerdan aquel hit que fue “Higher than the Sun”, incluido en el álbum Screamadelica de Primal Scream? Pues allá andaba metido nuestro hombre. Los cercanos Dub Sindycate, The Edge, the Orb o el llenapistas David Holmes también abrieron la puerta de su estudio de grabación para que Wobble colara esa inquieta mente que se caracteriza por innovar, romper moldes y desmontar estereotipos cuando hablamos de sonidos de herencia jamaicana o de músicas del mundo (la otra gran pasión de nuestro hombre).
Bebiendo de estas músicas globales este londinense ha editado 15 discos, el último de ellos titulado “Solaris” y repleto de “deep bass” marca de la casa, donde Harold Budd, Bill Laswell y Jaki Liebezeit (batería del grupo alemán Can) vuelven a colaborar en una nueva vuelta de tuerca creativa a los sonidos de madre jamaicana.
Comenzó en el mundo musical como bajista de P.I.L., el grupo del Sex Pistols Johnny Rotten/John Lydon. Tras dos años girando con ellos debe dejarlo. Más tarde describirá esa época como “auténticamente paranoica, repleta de excesos y castigos a la mente y el cuerpo”.
Tras esos días duros, su luz musical decrece. Consigue un curro en el metro de Londres, donde el abundante tiempo libre le permite empezar a introducirse en las músicas del norte de África y el Este europeo, además de profundizar en el lado jamaicano.
En esa época hay que situar el origen de su grupo Invaders of the Heart (donde destaca el guitarrista Justin Adams y Jaki Liebezeit). La definición de los grupos de Wobble irá mutando según el tipo de música ejecutada: Los Invaders se encuentran cercanos a la “World Music” , pero también se pueden encontrar otras referencias acompañando al nombre de este músico británico, como “Temple Of Sound” o “Deep Space”(que es la que se trae a Donosti).
Wobble asegura tener tanta confianza en lo que hace como temor al rechazo del público, muestra inequívoca de que su cerebro no para quieto. Hasta ahora siempre se las ha arreglado para sorprender, confundir y deleitar a sus fans, pasando de las directrices musicales de moda. Viendo la variada instrumentación de los seis músicos que acompañan al británico que se trae (elementos indios y de viento), su concierto donostiarra nos mostrará en que punto se encuentra esa batidora llena de tonos de mil raíces, mil vertientes y mil destinos. Destinos que por ahora solo existen en la cabeza de Jah Wobble
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