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Etiqueta: Nudozurdo

Nudozurdo: atractiva oscuridad

Intérpretes: The Secret Society, Nudozurdo. Lugar: sala Dabadaba (Donostia). Día: 17 de marzo. Asistencia: lleno, unas 150 personas

En otro fin de semana con numerosas actividades en la programación la sala Dabadaba volvió a llenarse de fans de los sonidos oscuros. La banda madrileña Nudozurdo llegaba a nuestra capital para presentar “Voyeur amateur”, su retorno a los guitarrazos tras un disco lleno de sintetizadores.

A la cita les acompañaron The Secret Society. Los de Pepo Márquez (Majestad, Grande-Marlaska) sufrió los rigores de los horarios. A la hora teórica del inicio de su evento aún andaban probando sonido, lo cual limitó su actuación en un par de temas. De su set de melodías nos quedamos con el acercamiento guitarrero a los cantares de McEnroe (“Ya solo quedan las marcas”), los momentos intensos (“Aquellos que lo quieren todo no merecen nada”) y sus pasajes de pop de barrio (“La distancia más corta entre dos puntos es el miedo”). Del momento reggae mejor nos olvidamos…

Pero tocar con Nudozurdo es un problema, porque cuando Leo Mateos – guitarra y voz- sale a escena todo lo anterior se torna pequeño y olvidadizo. No solo por la altura del muchacho, quien puede cambiar las bombillas del techo sin ponerse de puntillas. Hablamos de sus músicas y sus letras. Oscuras y atractivas, abiertas y contundentes. Hipnóticas, a fin de cuentas.

Y a la hora de ponerle pegatinas a este trío para que ustedes sepan dónde colocarlos deberíamos mencionar a los The Cure iniciales, a Ian Curtis y su magnetismo o a los grupos más angustiados de La Movida. Todo ello sin afán copista y con unas guitarras amplias y pulcras, bien sazonadas de tensión (“Ha sido tan divertido”) y épica (“Vigila tu espalda…”) en bellos crescendos (“Hijo de Dios”), rabias contenidas (“Prometo hacerte daño”) o calmas acústicas (“Mensajes muertos”).

Los noventa minutos de actuación conformaron a Nudozurdo como una formación única. Puede que la densidad de sus acordes o la oscuridad de sus fonemas no les ayude en su salto al estrellato. Pero pocos podrán negar que su atractivo creativo es muy superior al de la media.

Nudozurdo: Las aristas mandan

La formación madrileña presenta nuevo EP en lo que seguro será otro de sus magnéticos conciertos

Impone. Ves a Leopoldo Mateos, cantante y cabeza pensante del grupo Nudozurdo, atacando esas canciones oscuras e hipnóticas sobre un escenario, y no puedes apartar ni la atención ni la mirada. Letras desasosegantes. Ritmos ochenteros y tensos. La banda, ahora en formato trío, vuelve a Donostia con “Ultra Presión”, un EP de canciones sobrantes de su último y gran CD “Tara Motor Hembra”.

El nombre del nuevo lanzamiento hace referencia al parón realizado en 2011. ‘Tuvimos que tomarnos un respiro. Fue un año muy intenso de conciertos. Grabar un disco complejo supone un punto delicado. Necesitaba replantearme el aspecto financiero del grupo y disfrutar de los conciertos, cosa que no estaba sucediendo‘.

Dos composiciones, “Chico promo” y la subyugante delicia de “Contigo sin tí” (‘Es una canción especial. En directo notas el silencio que se hace y la naturalidad con que se va abriendo paso’), ambas incluidas en el setlist de conciertos, destacan en este nuevo lanzamiento sobre el resto, que tampoco es una colección de retales. ‘Estos descartes lo son porque no entraron en el concepto del disco anterior, no porque fueran menos interesantes. Regrabadas las voces para la ocasión, todo cobró una entidad diferente. Este EP esta lleno de energía. “Tara Motor Hembra” es un álbum más ambiguo y lleno de rincones menos agresivos‘.

Aunque las letras sigan caminando sobre aristas dolorosas -‘Muchas tratan de las cosas que no funcionan. Me gusta mezclar lo cotidiano con lo singular. Lo que debería ser con lo que es‘-, este trabajo pequeño suena a despedida y novedad, a cerrar el ciclo y arrancar con nuevas aventuras. Porque Nudozurdo ya se encuentra trabajando en sus próximas composiciones. ‘Ahora mismo estamos decidiendo los conceptos del siguiente disco. Hay dos líneas claras por las que podemos avanzar. Una más colectiva donde podríamos trabajar con sintetizadores analógicos y programaciones. Y otra en la que compondríamos dentro de un formato mas clásico. Podemos incluso mezclar ambas. Veremos. Las canciones mandan‘.

Nudozurdo: Tensión sintética

El cuarteto madrileño había dejado el listón muy alto con su anterior ‘Sintética’. Un puntal que no ha hecho sino afianzarse con el nuevo CD que presentan hoy en Gasteiz y mañana en Donostia.

Tara Motor Hembra’ son diez canciones de alma oscura y ejecución tan tensa como variada y brillante. Leo Mateos, voz y guitarrista de Nudozurdo, afirma que “el uso de la violencia en la música y en general en todas las artes está muy infravalorado. El tema “Prometo hacerte daño” es una canción que pretende hacerle justicia al concepto”.

El reciente trabajo cuenta con un gran atractivo lírico que pinta deprimente y apunta luminoso. “Me encanta cuando salen ideas inesperadas que me hacen preguntarme qué quieren decir. Me gusta escribir sin controlar el destino o la finalidad. El contraste es marca de la casa: oscuro-luz, limpio-sucio, arriba-abajo, obvio-ambiguo. Son canciones que hablan de cosas misteriosas como el amor, el odio, los celos, la amistad, la frustración, el deseo. La disfuncionalidad puede ser extremadamente bella. Y en muchos casos estamos abocados a ella”.

La banda ha sentido la necesidad de dar pasos diferentes a los ya muy aplaudidos. Un brinco que puede gustar sin mayores esfuerzos a los fans de Lisabö, El Columpio Asesino, Mercromina o Joy Division. “Somos de esos grupos que necesitan desmarcarse de si mismos para tener una sensación de avance”. Temas como el impresionante ‘Prueba/error’, ‘No me toquéis’, ‘Conocí el amor’, la manchesteriana ‘Golden Gotelé’ o ese ‘Dosis Modernas’ que German Coppini hubiera firmado con los ojos cerrados confirman lo acertado el cambio.

Una mutación que podremos ver en el escenario donostiarra. Para la cita local prometen tocar “dos o tres temas del primer disco, la mitad de ‘Sintética’ y la mitad del último”, mientras encuentran hueco en la entrevista para lanzar flores a uno de nuestros autores más interesantes: “Es difícil hacer música como la de Dotore. Tiene algo especial, no tiene prisa. Las melodías son inteligentes y las letras no pretenden apoderarse de la canción”.