Sigue tan denso y poético como siempre. Queriendo realizar haikus en cada línea, metiendo la Biblia en un grano de arroz.
Pero musicalmente todo suena más alegre y optimista que antaño. El antiguo cantante de Migala pasea su pop-folk por el lado más soleado de la vida – sin pasarse, claro- en esta preciosa colección de canciones.
Sé el primero en comentar