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Mes: mayo 2002

La Buena Vida

Teatro Principal – San Sebastián – 2002-05-09

Había ganas, y muchas, en la ciudad por volver a ver a La Buena Vida en concierto. Las noticas que nos llegaban de fuera hablaban de terrible éxito. Una gira invernal muy larga que solo había deparado parabienes de crítica, y lo que es más importante, público. Pero la ciudad donde uno nació siempre es diferente. Y más Donostia, que hasta que fuera no te aclaman aquí no te aplauden.

Así que nuestra primera sorpresa fue encontrarnos el Teatro Principal de la parte vieja donostiarra lleno. Fuera, en la calle, el agua caía por jarras. Ideal para quedarse en casita, escuchando música suave, con la persiana a medio bajar y bien acurrucado. Vaya, como dicen las canciones de La Buena Vida…

Tras descubrir entre el público a más de la mitad de La Oreja de Van Gogh (Donosti no es ciudad envidiosa) y algún que otro “reconocido” local, el concierto arranca bastante puntual, con un inicio precioso: las cuerdas (que no nos dejaran durante el concierto entero) de “Desde hoy en adelante”, una de mis debilidades buenavidienses, comienzan a sonar mientras el telón comienza poco a poco a alzarse. Le siguen “tormenta en la mañana de la vida” y “Melodrama”. Arranque fuerte y gozoso.

Sin entrar en detalles (pronto estarán en el Jovellanos de Gijón y en el Primavera Sound. Y sería como contar el final de “Sospechosos Habituales”…), este primer bloque de temas sirve para degustar canciones de los 3 últimos discos del grupo donostiarra. Algunos momentos más relajados, otros singles que nunca entenderemos cómo no los cantan las quinceañeras, su nuevo single “Blues por Charlie”(otro acierto. Y van…).Llega el interludio, donde Mikel e Iranzu, las voces, se quedan casi sin instrumentos para un par de canciones más sosegadas, lo cual se agradece. A veces el abundante sonido se los come.

Vuelve el grupo, que repite esquema del primer bloque. Y el bís, donde sorprenden (para mi de forma irónica) con el “La Vida sigue igual” de Mr Miami tabique-platino Iglesias y una canción de Neil Young!!. Acaba el concierto, se respira satisfacción en el aire. Fue precioso. En el previo del periódico local hablaban el día anterior de que eran “líderes de la liga B”, esa que se aleja de talones y concursos pero que vive centrada en las canciones. Si siguen elaborando temas (y conciertos) como el de Donostia, seguiré pensando que esos cantos a la tristeza, a la soledad, al desamor, a la felicidad, a las relaciones humanas de enfoque pop siguen sonando geniales en manos de La Buena Vida. Que se vive mucho mejor en Segunda, vamos…