Concejal se escribe con «c» de cara, ¿no?

Un 15% de los más de 66.000 concejales que hay en España se quedarían sin trabajo si perdieran el cargo que ocupan, según datos del Registro de Representantes Electos hechos públicos por el Ministerio de Administraciones Públicas. La cifra refleja las dificultades de muchos políticos locales —que son también las de muchos de ámbito nacional— para ganarse la vida lejos de los despachos oficiales, y viene acompañada de otra estadística, que quizá ayude a explicar el fenómeno: 20.000 ediles, un tercio del total, sólo han cursado estudios de la ESO o de un nivel equivalente.

Normal que busquen luego un retiro jugoso.

   La bajada de la media de edad de los representantes públicos municipales suele presentarse como un hecho positivo que demuestra la creciente implicación de los jóvenes en la vida democrática. Pero también puede considerarse una confirmación de la tendencia cada vez más acusada entre los ciudadanos: ver en la política una salida profesional y no una actividad de servicio a la comunidad guiada por sus mejores miembros. Pero quienes más tienen que aportar difícilmente pueden ser los más jóvenes.