While My Guitar Gently Weeps in New York

[atención, tostón guitarrero y personal]

A propósito de guitarras, ir a Nueva York a por ellas es práctica habitual estos días. El cambio de divisa Euro-Dólar (hoy, 1 euro = 1.5477 dolares) se inclina sobre manera sobre la moneda europea, lo cual hace que la paridad numérica en termino de PVP de gran parte de los productos (x dólares = x euros) caiga muy del lado del viejo continente.

Llegué a la gran manzana con mi gran sueño GASeoso de comprarme una Fender Telecaster, y bajo tal perspectiva comencé a recorrerme las tiendas que tenía localizadas un par de días antes de la vuelta, dato importante para el final de la historia.

La cosa andaba por unos 1395 dólares- 900 euros (ojo, siempre hay que añadirle el 9% de impuesto, no recogido en el ticket). Una relación que vimos detallada tal cual en más de un establecimiento. Los europeos arrasan también en este tipo de shopping.

guitar2

Tras quedar prendado del sonido de otra clásica y desencantarme de la pastilla oscura de la primera de las nombradas, la vocecilla de mi pepito grillo, plasmada en chica con falda y mochila al hombro, me hizo la pregunta que me desvelaría un par de noches:

Pero, ¿Tu no haces los conciertos con una acústica?¿Para qué quieres una eléctrica entonces?”.

Mierda. Touché. GAS evaporado.

Así que dedicamos similar presupuesto a la turbo-búsqueda de una electro-acústica al día siguiente (recuerden, uno para volver de vuelta). Tanteamos primero las tiendas cercanas a Times Square, que me dejaron un sabor agridulce cual pollo mandarín.

Por una parte, es EL sitio para buscar guitarras. Echarle un ojillo a las Gretchs de 2500 dólares era iniciarse en el vampirismo salivador rockero.

guitar3

Acústicas había unas 50 en una de las tiendas. Así que no parecía haber sitio mejor para probarlas, cosa complicada en ciudades pequeñas como la mía, donde sólo hay 4 en cada tienda y siempre de gama baja.

Pero el lado salado llegaba desde la localización y la atención. Las tiendas que visitamos, las grandes, estaban demasiado cerca de Times square como para ser pequeños recobecos de chollitos. Nadie compra barato en el centro de su ciudad.

Como en todas toditas todas las tiendas de Nueva York, ya vendan pompones o camisetas de Heroes, los tenderos te saludan amablemente al entrar y pasan de tu aura al salir. Mientras, si consiguen vender algo guay, sino, “anda ya estas tardando”.

Siguiendo la tónica habitual neoyorquina, llegué a la conclusión de que el tipo que te atiende gana buena parte de su sueldo en porcentaje de pasta vendida. Por ejemplo, hay carteles en todas las tiendas que te indican que “si quieres coger alguna, hables con el dependiente”.

Esto, que parece un ejemplo baladí de buena educación, no es más que una forma de asignar un vendedor a cada cliente. Lo vimos al regreso a la tienda donde habíamos decidido adquirir nuestra 6 cuerdas.

Al llegar y darse cuenta uno de los chicos que el día anterior nos había atendido otro, le llamó por el busca interno para que se acercara a atendernos y vender. “No me perdonaría nunca haberle hecho algo así”, dijo mientra tecleaba los números del teléfono.

Siempre tiran a lo más caro, y te intentan convencer de que lo que te proponen es lo mejor para tu arte, tu forma de tocar, tu cutis y tu figura estilizada. A mí me asesoraron bien, sin más. Y la cosa quedó entre una Martin y una Takamine

guitar5

[se admiten sugerencias sobre los modelos linkados entre los más versados]

Pateadas arriba y abajo llegaron a Carmine Street y Ludlow. La primera tenía un garito de segunda mano bastante majo, y la segunda era un calco de la nombrada en párrafos anteriores. Como curiosidad, en ninguna de las 6 tiendas que visitamos había el mismo modelo de guitarra. Si en una era FX en la otra EX y la siguiente FF.

Pero sigamos, que tras muchas vueltas nos decantamos por la brillante guitarra de bluegrass Taka-Taka. Ea! ya es mía! ¿No? No

Funda semiblanda que no dará problemas en el avión (y eso que al modelo elegido le quedaban micras para tener el culo de un guitarrón mexicano), pegatas para darle un toque propio a la novedad, pasar por caja, pasar la VISA y ya era mía….Siempre y cuando la VISA no se haga la remolona y la celosa. Japuta.

Resulta que cuando vas al extranjero y pagas billetes de avión u hoteles con la dichosa, el banco foráneo se queda con una cantidad similar a la pagada en concepto de “por si las moscas” o algo así.Aunque, eso sí, tu veas el cobro en tu banco a las 48 horas.

Como uno siempre tiende a poner un límite a la Visa, más por temor a la perdida y posible uso fraudulento que al desenfreno consumista personal, la cosa pintaba fea. Además era viernes 13…

Tras ser poseedor durante 3, 46 segundos de mi soñada, corrimos al cajero a sacar pasta. Imposible. Llamamos a nuestro banco ING. Re-imposible. Hace falta la tarjeta de coordenadas. Cabrones, podíais elegir otro día para funcionar de manera perfecta.

¡Hey! ¡Pero tenemos una Maestro!¡Estamos salvados! Que no os time la Kutxa. es más factible que os de pasta una tarjeta Travel en las Fosas Marianas que una Maestro en NY.

Vamos al hotel a ver si nos pueden gestionar ese desbloqueo VISero. Aunque hablen todos español de muerte, se hacen los suecos o los fineses. No tienen ni idea del tema. Aunque la tuvieran, poco íbamos a poder hacer un viernes a las 19 horas hora local.

Resultado. Guitarra en la tienda. Vuelta a casa. Llorera interna relativa. He conseguido probar muchas guitarras. Y poder comprar la seleccionada en Europa sólo 200 euros más cara que en USA. Algo es algo, pero una oportunidad perdida en la tierra de las oportunidades

[Aunque…¿Qué me pillo, la Taka o la Martin? 😀 ]

10 comentarios en «While My Guitar Gently Weeps in New York»

  1. Ya, era la idea.
    Pero toco sólo (no con banda), la acústica implica llevarte sólo una guitarra y poder tocar (la AC no), y tocar con mi high level una eléctrica me emparentaría, quizás, muy mucho, con Manolo Headbolo.
    Tengo una eléctrica que voy a empezar a recuperar. Si la cosa avanza, pedido USA 😀

  2. solo 200 euros más cara??
    entonces, para que el viaje?
    piense usted, viaje, hotel y macdonals para ahorrarse 200 euros en una guitarra, me parece que no es negocio.
    😉

  3. Hola Burt,

    – ¿Cuál de las dos te resultaba más cómoda de tocar?
    – ¿Cuál de las dos sonaba mejor enchufada? Porque las enchufaste, ¿no?
    – ¿Cuál de las dos sonaba más equilibrada en graves, medios y agudos?

  4. ba badakizu.. animatu zaitez eta ea antolatzen dugun ¨Bassmatti meets de Gora Gora Kids¨… y eso si que puede ser un hito en el punk…

Los comentarios están cerrados.