Resultado de la final del Mundial: Adidas 1 – Nike 0

No hay más que ver la celebración de la copa del mundo en la capital de España. Lo cuenta muy bien BarDeportes (mi bar preferido después del bar Refaelli), así que no me extenderé mucho más en la hoja de ruta –hijo de ruta, en este caso- o el casting.

Lo que a mí me alucinó fue que, por primera vez en mucho tiempo, vi a los protagonistas como secundarios. En la inmensa fiesta de celebración, las hormiguitas rojas tenían tras de sí un panel enorme de las mieles de su trabajo: los sponsors, quienes, dicen las buenas lenguas, se encargarán de buena parte del premio metálico de cada uno.

Las malas lenguas, siempre más atractivas, dicen que también obligan a veces a jugadores a jugar determinados partidos aunque estén medio cojos. Ronaldo, ahora Torres…

Nadie niega que deba haber patrocinadores, si el fin es mejorar las arcas propias o, en el caso de la celebración, aligerar las públicas. Las cuales, dicho sea de paso, no creo que sufrieran en exceso con un tablado, cuatro luces, un speaker oficial sacado del REMAR de los cómicos, músicos que aman España como nadie (dado que tocan en poblados y barriadas del extrarradio) y el alquiler por 24 horas del bus turístico de turno.

Pero, ah, que resulta que la selección de todos, la que ha luchado contra vientos de vuvuzelas, se pliega a unos contratos. Sí, amigos, esa es la verdadera razón por la que apagan la puta luz del vestuario, se pimplan una birra o anuncian Hemoal (si hiciera falta).

Helado me quedé cuando el Lastre parlanchin paro una parte de la celebración para decir “esperad, esperad, que ahora vamos a dar paso a un momento muy muy especial y único, ofrecido a la selección por Adidas”. Zas.

¿Y en qué consistió ese momento especial? ¿Domingas? ¿Un vale para comprar en Mediamarkt?. No. Poner la canción de (TeDas) Queen “We Are The Champions”. De nuevo. Por XXVVCCVV-va vez en el día. Con dos cordones. Y un banderín.

Es recurrente el trueque imagen-dinero. Pero es un mundo golosón, y los gestores futbolisticos van cediéndole cada vez más espacio y relevancia a estas pegatinas grandes y a los balones patrocinados y bien cobrados por la FIFA. Organismo que siempre cuida muy bien a los suyos.

Y no se vean alejados del vício por vivir en tierras particulares: la reciente feria de San Fermin – de pelota mano hablo- ha supuesto un gozo visual casi epiléptico a nada que se fijara la vista en esas paredes aparentemente verdes. Yo mismo estuve a punto de confundir a Titín con el anuncio de Tio Pepe.

Lo dicho, la cosa suele acabar como el canutillo de Pamela Anderson: A más inversión, menos sutilidad. Es por ello por lo que sugiero para próximas celebraciones…

  • Suprimir la recepción con el presi de turno. Una traba para la audiencia. Que si España está con vosotros y tal y cual. Con tan poca mano izquierda. Con lo fácil que hubiera entrado ahí “y para celebrar la victoria de la Roja subimos el IVA otros 3 puntos!”. Ya lo estoy viendo. La gente llorando de emoción, tirándose de las camisas, llamando a sus primos de América.
  • Que Nivea patrocine el mundial con su balón de playa. Apenas habría diferencia.
  • Que Plátanos de Canarias le ponga al traje del Rey un par de zurcidos con publicidad. Tope Meca. Qué hay más campechano ¡y español! que unos plátanos.
  • Que las telepantallas de Eurasia emitan durante 24 horas seguidas los anuncios de las empresas de…ay, no, espera, que eso es de otro libro.
  • Que Pepe Reina no sea cobarde y ruín, y empiece sus speech como debe: “Con el número 1, como Adidas en el mercado de cremas rasuradoras y vasodilatadores, el santo…”.
  • Que los jugadores aprovechen los tiempos muertos del partido: saques de banda para anunciar Sanex, en los corners Dixan (por los tirones de camisetas) y en los saques de puerta dentífricos o máquinas para hacer deporte en el salón de su casa.

Rian, rían. Ya llorarán dentro de 4 años.

10 comentarios en «Resultado de la final del Mundial: Adidas 1 – Nike 0»

  1. Yo me dejaría de complejos e iría un poco más allá: «Atención, córner a favor de España. Ahora sacará Xavi y Puyol cabeceará a gol, por cortesía de Adidas. Y…… efectivamente, gooooooooooooooool ¡El primero que marca España de saque de esquina, y todo, por gentileza de Adidas, tu marca amiga!» Y así todo el rato. Nadie se perdería el minuto de oro, porque se avisaría con unos segundos de antelación, todos tan contentos y a seguir facturando.

  2. y llegará el día en el que, como el basket, Cementos Portland-Grecia jugará contra LIDL-España

  3. No has comentado nada del amigo Rafa Nadal, que tiene telita el tema. Según me cuentan iba con la camiseta de la selección (de Adidas) y como a él le paga Nike, llevaba a modo de capa-abrigo-tapame-este-logo la bandera para que no hubiera mosquedo de los patrocinadores…

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